EE.UU. – Un policía llamado Curtis Shurtliff se encontraba disfrutando de su viaje de campamento familiar en Dinkey Creek en el Condado de Fresno California, la semana pasada, cuando Dios lo utilizó para salvar la vida de un niño que se había ahogado.
Según informó Christian Today, Shurtliff estaba fuera de servicio durante esos días, pero su formación como oficial de policía hizo que está alerta ante gritos de pánico que provenían de aquel lugar donde el estaba descansando. Oyó gritos cerca de su campamento, y cuando corrió para ver que sucedía, vio que un niño de 5 años de edad, acababa de ser sacado del agua.
La familia del niño, junto con Shurtliff, fueron rápidamente a ver al niño. Él no estaba respirando.
“Chequeó el pulso. Y No había pulso”, dijo Shurtliff. “Miré las pupilas del chico, y vi que estaban dilatadas”.
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Shurtliff, que es un ex paramédico y veterano de la Marina, realizó 30 minutos de RCP en el niño, pero no dió señales de vida. Luego de unos minutos, le preguntó a la madre del niño sobre su fe.
“Yo no podía darme por vencido con este chico”, dijo Shurtliff. “Miré de nuevo a la madre y le preguntó:” ¿Crees en Dios, Creen en Jesús como nuestro Salvador? ” Ella respondió: “Sí, lo creo”.
Todos entendieron que lo mejor que podían hacer por el niño era orar por él. Así que todos se unieron en una solo clamor. Fue entonces cuando el niño manifestó signos de vida.
“Tan pronto como terminaron, le dije, ‘En el nombre de Jesús oramos’, y sentí un impulso”, recordó Shurtliff.
Cuando los equipos de emergencia llegaron finalmente al camping, se llevaron al niño, que comenzó a respirar normalmente, rumbo al hospital.
La familia expresó su mayor agradecimiento por la ayuda de Shurtliff, pero él le dio toda la gloria a Dios en su lugar. Explicó con humildad y mansedumbre lo que sintió en su corazón. “Dios lo hizo. Ni siquiera había planeado estar allí”, dijo.
Fuente anteelpeligrodeapartarsededios.com