¿Cómo reencontrarte con Dios y poner tu confianza en él?

Compartimos este artículo de gran interés donde podrás comprender como encontrar la seguridad en Dios en tu vida. No dejes pasar más tiempo, hoy es un buen día para reencontrarte con Dios y poner toda tu confianza en él.

La palabra de Dios es la única fuente de confianza basada en sus promesas para todos los que aceptaron a su Hijo Jesucristo como su Único Salvador.

La confianza de Dios es firme y de por vida, porque su palabra es para siempre, no perece ni caduca. Se extiende a todas y cada una de sus promesas.

Como vemos en Josué 21:45 :»No faltó palabra de todas las buenas promesas que Jehová había hecho a la casa de Israel; todo se cumplió.»

Así también el poder de la Palabra en cada uno de nosotros, que actúa sin fallar, golpeando directo al corazón. Ninguna palabra de Él volverá vacía : Isaías 55:11 «Así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.»

Dios promete que cada persona que confiese que Jesús es el Señor y crea en su corazón que Dios le levantó de los muertos, será salvo (Romanos 10:9-10).

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Los planes que Dios tiene no cambian ni dependen de nuestras acciones, aún cuando tomamos malas decisiones o fallamos. Esto no significa pasar por alto el pecado de sus hijos, sino que Dios disciplina ante los errores para corregir nuestros camino (Hebreos 12:6).

Estar seguros de nuestra salvación trae a nuestra vida paz, gozo y alegría, pero la seguridad no debe ser en nuestra propia opinión ni según nuestros pensamientos, sino la seguridad debe ser en Dios. Debemos pedirle a Dios que nos confirme su Salvación cada día. No debemos ser conformistas. Cada día es comenzar de nuevo. Cada obra juzgará nuestra vida. Solo Dios puede darle el entendimiento para saber si está en el camino correcto. Debemos leer su palabra para saber como vivir nuestra vida según la voluntad de Dios. Si fallamos, debemos ir a lo secreto, orar al Padre reconociendo nuestros errores con arrepentimiento sincero, para el perdón de nuestros pecados. Incluso si nos hemos alejado de Él, Dios nos traerá nuevamente a sí mismo porque suyo es el poder, la vida y la salvación.

Nuestra vida debe estar fundamentada en el temor de Dios. No debe confundirse el temor con el miedo a estar atados y limitados, sino que el temor será quien nos guie a no pecar deliberadamente y cumplir la voluntad de Dios siempre, agradando en todo al Padre, desde obras, actitudes, pensamientos, maneras de vestir, y todo lo que conforme nuestra vida. Pongamos nuestra confianza y seguridad en Jesucristo nuestro único Salvador, quien nos dará la vida eterna por los siglos de los siglos. Amén.

Reflexiones Cristianas

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