Estudio científico revela el acto de “hablar en lenguas”

Un grupo de investigadores desarrolló una investigación científica hacer del estado de las personas cuando practican cánticos de adoración a Dios y momentos divinos como el hablar el lenguas. Han confirmado tales prácticas como verdaderas y divinas.

Algunas veces el Espíritu Santo se manifiesta en las personas a través de las lenguas angélicas que salen de su boca con palabras desconocidas. Un momento espiritual único donde la persona no tiene un pleno control de las palabras que está orando sino que es una verdadera obra del Espíritu en el creyente.

Actualmente, la ciencia logro respaldar esta manera de pronunciar palabras, hecho que demuestra esencialmente que el Espíritu Santo mueve activamente su patrón de habla cuando “habla en lenguas”, según la información relevada por el New York Times.

Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Pensilvania, muestra que los científicos rastrearon el flujo de sangre a través del cerebro en el momento que las mujeres hablan en lenguas y cantan canciones gospel.

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Dispusieron los datos hallados y lograron comparar los patrones creados por estas dos actividades emocionales, devocionales, donde los investigadores obtuvieron la identificación de picos de flujo sanguíneo y valles únicos para hablar en lenguas.

La Sra. Morgan, principal colaboradora del estudio, es una mujer convertida a Cristo, quien entregó su vida para servir al Señor, dice que considera la capacidad de hablar en lenguas un regalo. -Eres consciente de lo que te rodea -dijo-. “No estás realmente fuera de control. Pero no tienes control sobre lo que está pasando. Estás fluyendo. Estás en un reino de paz y gozo, y es una sensación maravillosa”.

Contrariamente a lo que puede ser una percepción común, los estudios sugieren que las personas que hablan en lenguas no tienen relación alguna con aquellas personas que sufren problemas mentales. Un estudio reciente de casi 1.000 cristianos evangélicos en Inglaterra destacó que quienes participaban en la práctica eran más estables emocionalmente que aquellos que no lo ejercían.

Fuente Evangelio Noticias

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