Recientemente el actor Brad Pitt ha tenido una entrevista con la revista T, y confesó que continua con el proyecto de hacer una película sobre Poncio Pilato, pero no es su deseo convertir la producción en una película religiosa.
La idea principal de la estrella de Hollywood es desarrollar una película épica pero sin religión. “Mi película sobre Poncio Pilato trataría de un hombre mediocre, o al menos un hombre normal, atrapado en una posición que no le gusta con gente que desprecia. Será una épica bíblica con sin mucho de Jesús,” expresó.
Brad Pitt ya ha confirmado que es 20% ateo y 80% agnóstico y luego hizo fuertes críticas a la película “La pasión de Cristo”, diciendo que el trabajo de Mel Gibson fue una exclusiva propaganda religiosa.
“Desde luego, no estará dirigida para el mismo público de la película de Gibson. Cuando vi esa película, sentí que estaba viendo una pieza de propaganda religiosa, como una película de L. Ronald Hubbard [fundador de Scientology] “, dijo el actor.
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Según la información que se conoce, el actor fue criado por un padre religioso muy duro. Inclusive en otras entrevistas llegó a comentar que la “línea dura” de su padre lo llevó a transformarse en un ateo. “Me criaron en base a la culpa cristiana que impone lo que no se puede hacer. Mi padre era bastante duro “, dijo en 2015 en una publicación de The Telegraph Magazine.
La Película de Pilato
La nueva película relatará la historia del oficial de Judea, quien, según cuenta el Evangelio, mandó ejecutar a Jesucristo, convencido por la multitud de su culpabilidad.
Se destaca por su estilo que pretende despegarse del canon bíblico, el protagonista se muestra como un personaje contradictorio, sin tener la voluntad de enviar a un hombre que cree inocente a un destino indigno pero que acaba sucumbiendo al poder del pueblo.
Vera Blasi, la guionista, ha señalado que además de “los hechos de los libros de la historia romana y judía y los cuatro evangelios” pretende reatar la vida de Pilato desde la infancia, cuando estaba en el ejército y consiguió el ascenso político. La guionista desea utilizar esta biografía narrativa como punto de partida, haciendo manifiesto el lado más humano del villano que “se lavó las manos”.
Fuente Diario Cristiano
