Una mala pasada podría haber terminado con la vida de Hernández,cuando el pasado domingo cayó en un tubo de desagüe de solo un metro y veinte centímetros de ancho situado en Los Ángeles, California.
Yessi Hernández estaba con sus primos jugando en un parque, donde había una estructura de hormigón con una parte revestida con tablas de madera. Una de esas tablas se rompió y el adolescente cayó de una altura de 25 metros, siendo arrastrado por la corriente de agua a una velocidad de 15 metros por hora.
El caso causa gran asombro porque según el Cuerpo de Bomberos, las víctimas de este tipo de accidentes mayormente no logran sobrevivir:
“Cualquier lugar subterráneo, particularmente que tenga residuos, puede producir gases tóxicos, como metano y sulfuro de hidrógeno. Entonces el aire respirable se convierte en un elemento clave “, señaló el portavoz de la brigada militar, Brian Humphrey.
“Las posibilidades de que alguien caiga en un tubo como ese y sobreviva son escasas. Las posibilidades no estaban a su favor y muchos llamarían su supervivencia un milagro. El chico tiene una tremenda fuerza interior”, aseguró.
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“A las 4:55, dos funcionarios del Departamento de Saneamiento encontraron al adolescente consciente y respirando en medio del torrente de desagüe. La base del lugar de acceso era de 3 metros de profundidad “, detalló el portavoz.
Según el pequeño, el motivo de haber logrado sobrevivir fue gracias a Dios, porque confiesa que puso su vida en las manos de Cristo y clamó al Señor por socorro:
“Yo oré a Dios para que me ayude y no morir. Todo estaba quieto. Sólo podía oír el agua corriendo y no podía ver nada más. “Estaba oscuro”, declaró el joven al canal de televisión KNBC. “Doy gracias a Dios por darme otra oportunidad para vivir”, dijo el adolescente al ser rescatado por los bomberos.
Fuente Biblia Todo Noticias
