La actriz estadounidense Meghan Markle pertenece a una familia evangélica, aunque hasta el momento ella no se había rendido a Cristo. Se ha dado a conocer, que su vida ha sido tocada de la mano de su futuro matrimonio y actualmente ha decidido bautizarse por las aguas, antes de su matrimonio con el príncipe Harry, el cual está programado para mayo de 2018. El Kensington Palace comunicó también que ella participará en la ceremonia de «confirmación de la fe», anglicana.
Meghan reveló que no había pasado por el bautismo pero ahora está dispuesta a hacerlo. En cuanto al compromiso fue anunciado el lunes 27, la Corona británica está a cargo de todas las providencias.
La unión de esta pareja se realizará en la Iglesia St. George’s, ubicada en el Castillo de Windsor, una de las residencias oficiales de la familia real en las cercanías de Londres.
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Además, la actriz está realizando el proceso para obtener la ciudadanía británica, a ser confirmada. Conforme a la tradición británica, iniciada con Enrique VIII, el rey es Gobernador Supremo de la Iglesia de Inglaterra.
La desición de bautizarse no es una exigencia formal para poder llevar a cabe el casamiento con el príncipe, pero Meghan lo ha deseado y lo realizará, al igual que lo hizo Kate, la Duquesa de Cambridge, que también fue bautizada antes de casarse con el Príncipe Guillermo en 2011.
Fuente Gospel Prime